"No tenéis ni puta idea"
San Patricio dixit
sábado, 29 de septiembre de 2018
Las doce vírgenes 7
sibila
Del lat. sibylla, y
este del gr. σίβυλλα síbylla.
f. Mujer sabia a quien los antiguos atribuyeron espíritu profético.
El Inspector
501
Siempre
disfruté con la comida bien elaborada, tanto guisándola como comiéndola. Mi abuela me acostumbró y yo
como buen nieto y afamado discípulo descubrí entre los fogones la paz, el
sentimiento más placentero que conozco. Soy un buen cocinero, que digo bueno,
excelente, y está bien que lo diga yo porque mi abuela ya falleció hace años.
Me encanta cocinar para mí y pocos más. Profesionalmente es demasiado
estresante por eso me busqué la vida en otras profesiones. Desde jovencito
aproveché los veranos para ir probando trabajos que no acabaron nunca de
llenarme hasta que un buen día descubrí a Mr. Marlow. Me pareció una rama
laboral interesante, investigar un delito, un crimen, puede considerarse parejo
a investigar una receta para cocinar un buen pescado. Tenemos que tener claro
lo que buscamos, que ingredientes y pistas tenemos, el modus operandi y los
medios de cocinado de que disponemos y con todo ello, hacer una especie de
reality show, ver los ramales viables y, cercando posibilidades, finalmente, con el toque maestro de cada uno,
dar la estocada y presentar el plato final o el caso resuelto.
Es
sencillo, abro la moleskine y empiezo a anotar. El cadáver pertenece a Ernesto
Pan Jurado, portero del edificio y que a su vez regentaba el kiosco sito en el
mismo portal. El cuerpo aparece tirado en una pequeña salita del domicilio del
finado anexa al kiosco. La sibila forense de ojos abesugados me indica que, a falta de una
exploración más concienzuda en la morgue, a la víctima le pegaron catorce
tiros. Los ángulos de entrada y salida de las balas son confusos, unos penetran
en el cuerpo desde abajo como si el que maneja el arma fuera un niño y otros
desde arriba como si dispararan desde alto o el extinto estuviese arrodillado.
Hay
que estudiar detenidamente las manchas de sangre en las paredes.
—Si
le parece bien, Inspector, mañana podríamos quedar para comer y así le cuento
mis avances...
viernes, 21 de septiembre de 2018
Ave Julius, morituri te salutant
Voy
a contaros una historia plural
basándome en hechos causídicos,
siguiendo consejos druídicos
probablemente llegará a ser viral.
siguiendo consejos druídicos
probablemente llegará a ser viral.
Al
valle de Turón en viaje astral
arrastrando material porfídico,
llegó un día Julius el verídico
con pinceles y un humor visceral.
arrastrando material porfídico,
llegó un día Julius el verídico
con pinceles y un humor visceral.
Con
la guitarra colgando al hombro,
y derramando acordes flechados
el valle va cubriendo de escombro
y derramando acordes flechados
el valle va cubriendo de escombro
va llenando páginas de asombro
dejándonos a todos embriagados.
viernes, 17 de agosto de 2018
Las doce vírgenes 6
envarbascar.
(De en- y varbasco)..
2. tr. Confundir, embarazar, enredar,
atascar. U. t. c. prnl.
Macario
y su gran angular
Menos
mal que traje el gran angular, de no haberlo sabido hubiera tenido que volver
al estudio a por él. Así y todo casi no me entra el culo entero en el
enfoque... No deja de ser una oportunidad para fotografiar desnudos, siempre
cuesta encontrar modelos que no quieran cobrarte un ojo de la cara. Ciertamente
es un culo colosal, grandioso, la piel lisa, tersa y sin granos, nacarada diría
yo, voy a cerrar un poco el diafragma, con menos luz todo queda más íntimo y
romántico. Tan envarbascado estoy que lo
único que deseo ardientemente es llegar a casa y ver mi trabajo a pantalla
enorme y con los millones de pixels en todo su esplendor.
Creo
que voy a tener que dejar los primeros planos, el puto Inspector hace rato que
me mira mal. Jodido listo, menudo gilipollas, como le gusta cocinar, se cree el
Carvalho de la comisaria de Arganzuela. Recojo mis bártulos y me voy salivando
y con un amorcillamiento considerable.
Considera la deuda pagada gordo cabrón.
Las doce vírgenes 5
cogitar.
(Del lat. cogitāre).
1. tr. ant. Reflexionar o meditar.
Rodolfo y la buenorra del gym
Otra noche más de guardia y mi mujer
seguro que se está follando a algún maromo de esos cachas del gimnasio. Tiene
que ser eso sino, no me explico esta afición al ejercicio, a las pesas y a todo
lo que sea que haga en ese, creo que ahora lo llaman, Gym. Cualquier día le va
a dar un simposio de tanto ejercicio que hace y tantos asteroides que se mete.
Joder, la verdad es que se está poniendo la muy cabrona dura como la culata de
la HK. Algo trama y mientras yo estoy aquí cogitando en ello, ella seguro que
está... Se me ponen los pelos de gallina solo de pensarlo. Un día la mato, saco
la escopeta recortable y le pego dos tiros. Ella se dará cuenta de que no todo
el monte es orgasmo y yo veré esto desde otra perspectiva. Todos saldremos
ganando, mis compañeros, la forense, el puto juez este engreído como la madre
que lo parió, en fin todos, mi mujer tiene el culo muchísimo más guapo que este
tipo que está aquí tirado. Catorce tiros encajados lleva el hijo puta gordo
este, era un cabrón cojonudo y debía de tener muchos amigos en el facebook,
porque los que están aquí, todos se están descojonando con los chistes que
suelta el andaluz este de los granos. Menuda pinta tiene, voy a preguntarle si
tiene algo de farlopa, la noche va a ser larga y cuando llegue a casa quiero
darle bien a la parienta después de contarle lo que le pasó a su amigo el
quiosquero. Uno menos en la lista.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)